Buscar este blog

viernes, 20 de septiembre de 2013

DIOS SE MERECE TODO LO MEJOR!!

"EL PROBLEMA NO ES TU AUSENCIA, EL PROBLEMA ES QUE TE ESPERO" dice la letra de una canción, que puede o no gustarnos el autor y/o la letra, pero para lo que quiero compartirles a mi me ayuda a comenzar la reflexión.
Mis amados hermanos, amados católicos, amados cristianos, amados hijos de Dios en general ¿Cuándo dejaremos de jugar a las escondidas con el Señor? ¿Hasta cuándo tendrá que seguir esperando una respuesta de nuestra parte? ¿Cuándo empezaremos a caminar como Dios plantea?
en esto radica el gran problema de la humanidad, asi como dice el versito de la canción: no es problema la ausencia de la humanidad, el problema es que dejamos a Dios esperándonos. hacemos que Dios tenga que esperar nuestras decisiones para que muchos reciban su bendición. Pero eso no es todo, es que ni siquiera estamos ausentes por completo, sino que el problema es que estamos atornillados al título de cristianos, o al título de servidores de Cristo, y ni siquiera nos damos cuenta que estamos estancados y que con ese estancamiento retrasamos el obrar de Dios.
El problema no es que nos ausentemos totalmente, porque eso al menos sería una decisión y dejaría lugar a que Dios determinara otra cosa, y con esto no quiero decir que Dios está sometido a nuestras decisiones o que su poder está supeditado a si doy o no mi respuesta, Dios es Dios y como Dios puede hacer lo que quiera, como quiera y cuando quiera. Pero Dios quiere que sus hijos sean portadores de su gracia, quiere usarnos y quiere hacer las cosas a través de nosotros, que nos decimos sus hijos y servidores. Ese es el problema... ¡¡QUE NOS ESPERA!!
Si nos planteáramos esta verdad siquiera nos daríamos cuenta que quien está esperando por nosotros no es un ser humano, no es un presidente, no es un jefe, no es cualquier cosa, o un objeto, no es un sentimiento ni una simple acción, el que nos espera es DIOS.
Por lo tanto, vuelvo y repito, no sería mayor problema si nos borráramos, al menos Dios contaría con mi negativa, sino que el tema pasa porque hacemos esperar a Dios y trabamos su obrar con nuestra indecisión.
Muchos, muchisimos hermanos nuestros todavia no conocen a Dios, y Dios está a la espera de que nosotros nos decidamos a transmitir con la vida misma, con palabras y con hechos, su verdad, su vida, su amor, su bondad. Dios espera que nosotros seamos portadores de su Ser. Dios espera pacientemente que nos decidamos de una buena vez a dar los pasos necesarios para que ese encuentro con los hijos que todavia no han escuchado hablar de Él se enteren de su existencia. Y nosotros, los más cristianos, detenidos en el tiempo con las pavadas mundanas, con las pequeñeces del ombligo, con los caprichos de malcriados, con el ego que nos lleva de la nariz!!! Hasta cuándo!!
Hasta cuando vamos a privar del amor de Dios a los demás! Hasta cuándo esperará el Señor nuestra decisión.
Podrán decirme que ya hemos decidido, que ya estamos en camino, que ya empezamos... Amén y bendito es Dios. Pero yo vuelvo a mirar la realidad y veo, con muchisimo dolor, y yo misma incluida, que mi respuesta es demasiado cobarde, pequeña, humana. 
Dios se merece que hagamos lo que Él quiere, como Él quiere y para su mayor gloria, dejemos entonces de buscarnos a nosotros mismos dentro de la religiosidad y expresemos y compartamos todo lo que verdaderamente recibimos de Dios, que es mucho más de lo que podemos pensar o pedir.
Dios es Dios y eso basta!!! Amén

No hay comentarios:

Publicar un comentario